El lunes 14 se celebró en la Audiencia Nacional el juicio por la demanda presentada por los sindicatos CSI y STC-CIC, contra el acuerdo firmado por Liberbank, CCOO y UGT. A dicho juicio asistimos trabajadores de Cajastur; que constituíamos la mayoría de los presentes en la sala. No estuvo presente ningún miembro de los sindicatos traidores CCOO y UGT; tampoco nadie se dignó representarles, ni defenderles.
En lo que fué la propia vista, los demandantes se apoyaron en contundentes evidencias para constatar lo que todos sabemos: la empresa y CCOO + UGT pactaron el día 25 de junio de madrugada, con nocturnidad, premeditación y alevosía; para desconvocar la huelga convocada para ese día y, de paso, intentar entregarle a la empresa el necesario acuerdo para avalar los salvajes recortes que nos está aplicando.
Por parte de la representación de la empresa, simplemente negaron, mintieron, e intentaron descalificar toda aquella opinión que no fuera la suya: para ellos no tiene ningún valor la opinión de la Inspección Especial de Trabajo, ni del Ministerio de Trabajo, etc., solamente son válidos los argumentos de aquellos que firman los informes que previamente les han contratado.
Una vez finalizado el juicio, debemos esperar a que sus señorias emitan el veredicto, a conocer la argumentación que exponen y, a partir de ese momento, evaluar las diferentes opciones legales que se nos presentan.
También estaba prevista la celebración de otro juicio el 15 de octubre, en el que se habían acumulado las demandas presentadas por diferentes sindicatos; pero este juicio se ha aplazado hasta conocer el resultado del primero, que puede afectar al pospuesto.